jueves, 6 de mayo de 2010

La judería de Ubrique



Revisando las notas de Manuel Cabello, encontramos hace casi un año un montón de apuntes sobre moriscos y judíos en Ubrique: edificaciones, fechas, zonas y posibles localizaciones.
Esos datos se reflejan también en su libro "Ubrique, piel al descubierto", en uno de los itinerarios por el casco antiguo:


La Trinidad, 1987
Foto: Manuel Cabello


"Nada más alcanzar la Plaza de la Trinidad, sobre un parámetro construido al efecto y bien visible, se hallan dos murales de cerámica, realizados con la técnica del sobrepaño. Uno representa a la Santísima Trinidad y el otro al Beato Diego José de Cádiz (Ubriqueño de derecho y gaditano de adopción, ya que nació, forzado por la enfermedad de su padre, en la capital gaditana).



El primero de estos murales tiene su origen en otro muy parecido que colocara el propio Beato en ese lugar en 1781, cuando vino a predicar las honras fúnebres del V.P. Ignacio Calvo. Destruido éste en los sucesos de 1936, se reconstruyó nuevamente, intercalándose las piezas que se salvaron del expolio en 1939, año en que se colocó el segundo mural como homenaje de Ubrique al Santo.

Calle Toledo, años 70

La Plaza está bordeada por algunas edificaciones en estado muy lamentable, pero hay que detenerse en una, adosada a los murales que hemos comentado, al parecer del siglo XVII (la madre de Cecilia Böhl de Faber la menciona en su diario) la cual conserva en los bajos restos que, personalmente, atribuyo a una sinagoga. Hipótesis que argumento por estar en la calle Toledo, por ser presumiblemente barrio de la Judería y por la estructura que aún perdura del antiguo templo, que puede visitarse en los sótanos del corralón de la Trinidad.



Interior del Corralete de la Trinidad
Foto: Manuel Cabello 1987

Desde esta Plaza podemos alcanzar la del Ayuntamiento a través de la calle Botica, construida en el siglo XVII, cuando Ubrique se expandió buscando la llanura de sus huertas. Es una auténtica calle abalconada muy bella en su conjunto, en la que destaca la herrería de forja de los balcones. La casa número 15 corresponde a una antigua farmacia (botica), que le da nombre a la calle, siendo en la actualidad una auténtica reliquia farmacológica. Otra de las calles que desembocan en la plaza es la de Pemán (calle Los Solanos), de gaditanísimo nombre, dedicada a José María Pemán.


Calle Toledo desde el Portichuelo
Años 50

Por último cierra esta plaza la calle Toledo (Alcázar de Toledo), cuyo nombre es una referencia clara a la capital española de los judíos, y pensamos que esta calle, así como las colindantes (los Solanos, los Morales, Cantarrana...) formaron parte del barrio de la judería anteriormente citado".



Hasta aquí la historia que cuenta nuestro padre. A ella tenemos que añadir una gran curiosidad:
Cuando hace un año empezamos a revisar los documentos sobre la judería, movimos unas cuantas fotografías que nos parecieron interesantes: las del interior del Corralete con sus columnas y sus antiguos habitantes.
Al poco tiempo, nuestro amigo Manuel Jesús, muy interesado por la historia de Ubrique, nos explicó que los antiguos habitantes del corralete eran sus abuelos; que precisamente esas fotos que nuestro padre había hecho en 1987 era de la casa de sus abuelos; que la señora tan sonriente cuya fotografía está en "Ubrique, piel al descubierto", es su abuela:



Hemos buscado desde entonces las fotografías originales de los abuelos de Manuel Jesús en el Corralete de la Trinidad, en la posible "judería" de Ubrique, pero aún no la hemos encontrado. Así que por fin está hecha la entrada, y quedan los dos testimonios: el familiar y el histórico.


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